El precio de la vivienda de segunda mano se ha disparado un 9,3% en solo un año en la provincia de Alicante, solo por detrás de Málaga. Y es que la alta demanda y la falta de oferta de obra nueva está empujando al alza el precio que se paga por la vivienda usada.
El precio medio de la vivienda de segunda mano en la provincia se sitúa en 1.670 €/m2, mientras que en la vivienda de obra nueva es de 2.079 €/m2. En Altea el precio aumenta de manera notable, siendo de 2.317 €/m2 con una subida interanual del 7,1%, solo superado por Polop y Finestrat dentro de la Marina Baixa. Pedreguer, Teulada y Calpe son los municipios que han registrado las mayores subidas en la Marina Alta.
El año 2021 fue positivo para la vivienda, con un fuerte incremento de las ventas a causa de la demanda acumulada después de meses de confinamiento y un cambio en el interés de los compradores para mudarse a casas más amplias con espacios al aire libre. De hecho, esta fuerte demanda se ha traducido en una reducción de la oferta en la vivienda unifamiliar en zonas tranquilas con espacios naturales. Esta situación en el mercado inmobiliario ha traído 21 meses de incrementos en los precios de la vivienda de segunda mano.
La provincia de Alicante, pese a situarse a la cabeza en las subidas, no es una zona donde la vivienda de segunda mano sea especialmente cara. Madrid, Guipuzkoa, Baleares o Barcelona superan ampliamente ese precio medio de 1.670 €/m2. La Costa Blanca y zonas como Altea son el lugar preferido para la adquisición de una segunda residencia, tanto como inversión como vivienda vacacional.
Un buen indicador de la salud de la que goza la compra de vivienda de segunda mano en España es el interés por parte de ciudadanos extranjeros. La demanda internacional ha registrado su nivel máximo de los últimos diez años en el segundo trimestre del 2022. Por nacionalidades, británicos, alemanes y franceses encabezan el número de operaciones de compraventa.
