Estos días hemos conocido que las ventas de viviendas registran su mejor semestre desde 2008. Según los datos del INE, en junio se han registrado 48.201 transacciones de viviendas, confirmando tanto el mejor dato del año 2021 como el mejor mes desde mayo del 2008. El mercado de la vivienda se ha visto impulsado por una mejora en la economía y el ahorro de las familias, volviendo la actividad del sector al periodo prepandemia.
Nunca habíamos estado tan predispuestos a cambiar de casa y la pandemia del coronavirus ha tenido mucho que ver en ello. El confinamiento, el pasar más tiempo que nunca dentro de casa, la necesidad de disponer de espacio para teletrabajar o zonas al aire libre como terrazas o jardines, ha hecho cambiar en gran medida los hábitos de compra de vivienda.
Los chalets y viviendas unifamiliares han sido los grandes favorecidos con estos criterios de compra. Según los datos del Colegio de Notarios, entre enero y abril se ha formalizado la compraventa de 47.536 viviendas unifamiliares en España, un 60% más que en el mismo periodo del año pasado.
Razones por las que queremos mudarnos a un chalet
Los cambios en nuestros hábitos de vida a raíz de la pandemia han hecho que busquemos un tipo de casa que cumpla con una serie de criterios. Si antes se daba mucha importancia a la cercanía del domicilio al trabajo o al centro de la ciudad, a costa de una casa más pequeña, ahora estos criterios han ido cambiando.
La apuesta es buscar viviendas de mayor tamaño y con espacios exteriores al aire libre como terrazas, piscina y jardín. De hecho, ha pasado a ser una prioridad para el 92% de los compradores por el temor de quedarse confinados y no poder salir a respirar aire fresco. A pesar de que esa situación parece ya lejana, los compradores se decantan por viviendas que tengan mucha luz, terraza, jardín, y zonas comunes, como piscina o salas de recreo.
Ahora se tiene más predisposición a dejar la ciudad o el centro urbano para mudarse a vivir a entornos rurales o urbanizaciones residenciales. Se prefieren casas más grandes, que suelen estar más alejadas del centro, con todas las ventajas que supone: mayor contacto con la naturaleza, facilidad de aparcar, mayor privacidad y tranquilidad, etc. Unos elementos de gran interés, sobre todo cuando se tienen hijos pequeños o se busca una vivienda para la jubilación.
También se le da mucha importancia a casas eficientes. Dentro de los factores más decisivos para la compra de una casa crece el interés por viviendas con un alto rendimiento de eficiencia energética: viviendas con buen aislamiento térmico y acústico, instalaciones de aire acondicionado, calefacción y electrodomésticos de bajo consumo, posibilidad de colocar placas solares, etc.
La venta de chalets y villas en espacios naturales, lejos del centro y con amplias estancias ha crecido a causa de la pandemia.
¿Será una moda pasajera?
Parece claro que la pandemia del coronavirus ha cambiado los hábitos de vida de muchas familias. Optar por una mejor calidad de vida, buscando viviendas que reúna mejores condiciones como una mayor superficie o zonas verde son criterios que han venido para quedarse. El hecho de pasar más tiempo en casa ha hecho aparecer nuevas necesidades respecto a nuestra vivienda.
Por otra parte, la tendencia inversora ha vuelto a confiar de nuevo en la vivienda como valor refugio. Todos los mercados han crecido este año: viviendas de lujo, segundas residencias, casas para alquilar, etc. Y la compra de chalets también, siendo la cifra más alta desde 2007.
El ahorro parece ser el principal problema para comprar un chalet. Pero esta situación financiara de las familias parece haber mejorado en términos generales con la pandemia. El ahorro de los hogares está en máximos históricos, con una tasa del 14,85% de su renta disponible, según el INE. Además, las ofertas en hipotecas también favorecen la compra de chalets y viviendas unifamiliares. Los últimos meses los bancos han mejorado las condiciones de financiación, con un Euríbor que ha cerrado el mes de julio con un nuevo descenso (-0,49%). Los buenos precios de las vivienda en venta han permitido cerrar un buen semestre en cuanto a ventas, siendo este año un buen momento para comprar una vivienda.
Detalles a tener en cuenta antes de comprar un chalet
En buena medida el precio de una vivienda unifamiliar será mayor que un apartamento. Habrá excepciones, como áticos en primera línea de mar o zonas muy exclusivas, pero por norma general una villa residencial, con mayor superficie y terreno, tendrá un mayor valor. Por tanto, conviene analizar nuestra capacidad de compra y valorar el cambio de vivienda.
Además, los gastos de mantenimiento, energía, comunidad, IBI, etc. aumentarán por las características y tamaño de la casa. En la mayoría de los casos nos ahorraremos cuotas de comunidad, aunque nos tendremos que hacer cargo de todo el mantenimiento de la vivienda. Además, conviene tener en cuenta que deberemos invertir en un buen sistema de alarma o un seguro del hogar. También conviene recordar que, seguramente, la ubicación estará más alejada del centro, lo que aumentará la dependencia del coche.
Las condiciones para comprar un chalet son idoneas, por lo que si tienes dudas con un trámite o estás buscando una villa en la zona de Altea, no dudes en ponerte en contacto con Ampervillas. Te asesoramos sin compromiso.
