Aproximadamente un 28% de casi los 8.000 kilómetros de costa en España están urbanizados, especialmente en lo que se denomina el arco Mediterráneo que incluye Cataluña, Comunidad Valenciana, Baleares y Murcia.

El estilo de vida mediterráneo, unido al buen tiempo, hacen que destinos de playa como Altea sean lugares perfectos para comprar una vivienda, ya sea para vivir en ella o como inversión.

A pesar de la crisis inmobiliaria, las viviendas situadas en regiones de costa son los que antes están recuperando su valor. Además, estas propiedades suelen ser las más atractivos para los ciudadanos extranjeros que visitan nuestro país con intención de alquilar o comprar una vivienda.

Según datos publicados por el INE, los precios están empezando a subir de nuevo tirados por la demanda en determinadas zonas costeras, pero todavía es posible encontrar oportunidades de inversión inmobiliaria que permitan obtener una interesante rentabilidad.

Cabe destacar las rentabilidades superiores al 5% en viviendas destinadas al mercado de alquiler, en zonas turísticas de costa, ya que estos destinos alcanzan ocupaciones superiores al 90% durante los meses de veranos, en plena temporada alta.

La costa mediterránea sigue siendo el lugar preferido por los extranjeros para comprar una vivienda, ya sea como lugar de vacaciones, segunda residencia o retiro tras la jubilación. Las operaciones de compraventa de viviendas por parte de ciudadanos extranjeros con intención de residir en zonas como la Costa Blanca, donde la calidad de vida se sitúa por encima de la media según la escala de la OCDE, sigue en claro crecimiento. Durante la primera mitad de 2016, la Comunidad Valenciana registró 11.557 operaciones por ciudadanos extranjeros, lo que supone más del 34% de las transacciones.

Por nacionalidades, los compradores británicos, franceses, alemanes y belgas buscan más oportunidades de inversión con viviendas con el precio más bajo. Por el contrario, rusos y nórdicos buscan viviendas exclusivas que apenas notan las bajadas del mercado inmobiliario.

Según los expertos, destinos turísticos consolidados de la Costa Blanca cuentan con una atractiva oferta de apartamentos cercanos a la playa y villas en urbanizaciones exclusivas a precios interesantes. Estas viviendas son una excelente inversión, ya que resisten mucho mejor las crisis y se alquilan más fácilmente.

En definitiva, teniendo en cuenta la evolución del mercado inmobiliario, ahora es un buen momento para invertir en una vivienda en zonas costeras como Altea, pero para acertar es aconsejable dejarse asesorar por un especialista inmobiliario que conozca tanto las ubicaciones más demandadas con bajo stock de viviendas sin vender, como las propiedades más interesantes desde el punto de vista de la inversión.