Encontrar una casa a nuestro gusto no es nada sencillo. Muchos de nuestros clientes vienen a nuestra inmobiliaria de Altea la Vella con la duda de si comprar un terreno para construir su propia casa o comprar una casa de segunda mano para reformar.
Ambas opciones suponen invertir en la construcción y/o reforma de la vivienda, pero permite adaptar la casa a las necesidades y gustos que tenemos. Pero ante la duda si es mejor comprar una casa para reformar o construir una casa desde cero, debemos analizar las diferentes ventajas e inconvenientes de cada opción.
Comprar una parcela para construir
La principal ventaja de comprar un terreno y construir una casa a medida, es la gran libertad que esto supone. Podremos elegir desde el tipo y diseño de la vivienda, la distribución de los espacios y estancias, hasta los servicios que dispondrá según nuestras necesidades, estilo de vida y gustos personales.
El primer paso sería buscar un terreno adecuado, y aquí nos topamos con el primer inconveniente. Buscar una parcela para construir no es tarea fácil. No solo porque no hay muchos menos terrenos que viviendas en venta, sino que muchos de esos terrenos no son urbanizables. Y entre las parcelas que tenemos, no siempre serán acordes a lo que buscamos: muy grandes o muy pequeñas, muy alejadas de la playa o del pueblo, etc. Esta búsqueda puede llegar a ser tediosa y frustrante.
Comprar una parcela para construir permite no tener limitaciones en cuanto al diseño y distribución de la casa.
Una vez que tenemos clara la parcela que nos gustaría comprar, debemos acudir a una empresa constructora. El arquitecto y los técnicos nos podrán dar la solución más adecuada y factible desde el punto de vista técnico, adaptándose a nuestro presupuesto y necesidades. En este sentido, otra de las ventajas es poder participar directamente en el proceso de construcción para poder tener exactamente la casa que deseamos. Sentiremos que la casa es también obra nuestra, pudiendo contribuir en el desarrollo de la obra, desde los cimientos hasta los últimos detalles y acabados.
Pero este proceso de construcción de la casa desde cero implica tener tiempo y compromiso activo por nuestra parte. Deberemos acudir a decenas de reuniones con la empresa constructora para tomar decisiones en cuanto al diseño, materiales, distribución, etc. Y como hemos visto antes, previamente a empezar con la obra, deberemos también dedicar mucho tiempo a la búsqueda de la parcela adecuada, además de estar pendiente de una serie de papeleos para poder construir: proyecto de obra, permisos con el Ayuntamiento, estado de la urbanización, acometidas de agua, luz y desagües, etc.
En cuanto al coste económico, construir una casa a medida os permitirá adaptar nuestros bolsillos a la casa. Si tenemos un presupuesto limitado, podemos reducir los metros de la vivienda y planificar junto al arquitecto un proyecto de futuras ampliaciones si fuera necesario. También podemos elegir los materiales en función del presupuesto, aprovechando la gran variedad de calidades y marcas. Otra ventaja es poder hacer frente a los pagos de la casa de una forma programada. Por ejemplo, podemos comprar en primer lugar la parcela donde vamos a construir, y esperar algunos años para recuperarnos antes de empezar la obra.
No obstante, todo este proceso de comprar una parcela para luego construir la casa es muy lento, que puede llevar incluso años. Para construir una vivienda necesitamos un proyecto firmado por un arquitecto y un arquitecto técnico, cuyos trámites pueden dilatarse en el tiempo. También el propio desarrollo de la construcción requiere de unos plazos que en pocas ocasiones se podrán agilizar. Si lo que necesitamos y queremos es una casa para vivir rápidamente debemos tener en cuenta otras opciones.
Comprar una casa de segunda mano para reformar
Comprar una casa y hacer una reforma es más cómodo y rápido respecto a construir la casa desde cero. Pero también puede resultar que el precio final sea más caro, o no. Todo dependerá del estado de la vivienda, del grado de reforma que queremos realizar y del precio de compra. La oferta de viviendas de segunda mano es mayor que la de parcelas en venta, por lo que con un poco de paciencia y capacidad de rastrear el mercado, podemos encontrar una casa de segunda mano a buen precio y perfecta para hacer una reforma y adaptarla a nuestros gustos y necesidades.
Comprar una casa de segunda mano y hacer una reforma permite tener más opciones en cuanto a la ubicación.
Como tendremos más opciones de viviendas de segunda mano que de parcelas, cuando buscamos una vivienda para reformar tenemos más opciones en cuanto a la ubicación de la casa. Y este suele ser un factor determinante, ya que la cercanía al trabajo o a un buen colegio para nuestros hijos puede ser nuestra prioridad número uno.
Como compradores tendremos en mente la casa de nuestros sueños, su tamaño, distribución, vistas, calidades, etc. Al buscar una casa de segunda mano, puede ser muy complicado que seamos capaces de encontrar una vivienda que cumpla con todo. En este sentido debemos tener una visión analítica de la casa que se nos presenta y la casa que queremos, estudiando las reformas que podemos hacer.
En este caso, es interesante que un técnico nos acompañe en alguna visita a la casa para que pueda dar su opinión sobre esa reforma que nos gustaría realizar. Puede pasar que nos gustaría realizar reformas en esta casa de segunda mano que posteriormente son inviables, bien por limitaciones técnicas (orientación de la vivienda, muros de carga, desniveles, etc), o bien por limitaciones legales (ampliaciones no permitidas, fachadas que no se pueden modificar, etc.).
La principal ventaja de reformar una casa de segunda mano es poder reducir plazos y poder acceder a la vivienda de una manera más rápida. Aunque esta opción también implica realizar una obra de reforma, en la mayoría de los casos los tiempos de ejecución son mucho más cortos. La duración de hacer una reforma dependerá de lo que necesitemos arreglar, pero desde luego solo nos llevará unos meses, incluso en una reforma integral. Además, solo necesitaremos solicitar una licencia de obra al Ayuntamiento, cuyo procedimiento es muy abreviado. Si en la reforma no vamos a tocar elementos de la estructura, estos permisos se pueden conseguir en un día.
Conclusiones
No es posible afirmar que una opción sea definitivamente mejor que la otra. Factores determinantes como la localización o el tiempo de ejecución varían sustancialmente entre una y otra opción. Comprar una casa de segunda mano y hacer una reforma implica menos tiempo y permite tener más opciones en cuento a la ubicación que buscar una parcela en venta para construir. En cuanto al precio, la diferencia económica entre las dos opciones no es tan grande, aunque dependerá de lo que buscamos. Finalmente, si lo que buscamos es no tener limitaciones en cuanto al diseño y distribución de la casa, comprar una parcela para construir desde cero será nuestra mejor opción.
Si tienes alguna duda sobre viviendas y parcelas a la venta en Altea, no dudes en consultar con Ampervillas, inmobiliaria con más de 35 años de experiencia en la Costa Blanca. Te asesoramos sin compromiso.
