En la búsqueda de una vivienda, uno de los factores de decisión que cada vez cobra más protagonismo es la orientación de la vivienda. Aprovechar más las horas de luz y la calidez del sol es primordial, más aún si se trata de una obra nueva donde podemos diseñar la orientación antes de construir la casa.
Cada orientación tiene sus ventajas e inconvenientes, dependiendo además del clima de la localidad donde está la vivienda y el estilo de vida que hacemos en ella. Te contamos las características de cada orientación, siendo las más interesantes la orientación sur y este para las viviendas de Altea.
Orientación este
El sol sale por el este, más o menos entre el penón de Ifach de Calpe y el mar Mediterráneo, según la época del año. Una vivienda orientada al este disfrutará de luz natural desde el amanecer y durante la mañana, cayendo por la tarde el sol en la parte trasera de la casa.
Es una buena opción para la zona de Altea, ya que la vivienda se calentará durante las horas de la mañana, sin ser además las más calurosas, y ese calor se liberará durante la tarde-noche. De este modo durante los meses de verano se puede ahorrar en el aire acondicionado, aunque en invierno podría aumentar el consumo de la calefacción.
La distribución ideal de estas casas con orientación este sería situar mirando al este las estancias que utilizamos más durante la mañana, para recibir más luz natural durane la mañana´. Si teletrabajamos, podría ser el despacho. Si hacemos mucha vida en casa podría ser el salón o la cocina. En la parte trasera de la casa, donde recibirá el sol a última hora del día, podemos situar los dormitorios.
Orientación oeste
El sol se pone por el oeste, más o menos entre Serra Helada y el Puig Campana, según la época del año. Una vivienda con esta orientación tendrá luz del sol durante toda la tarde.
No es la mejor opción para las viviendas de Altea, ya que por el día apenas se aprovecha la luz natural, y por la tarde el sol incidirá sobre la casa durante las horas de más calor, especialmente en verano. Esto supondrá un mayor consumo de aire acondicionado.
La distribución ideal de estas casas con orientación oeste sería situar mirando al oeste las estancias que utilizaremos más a la tarde o que nos interese que reciba más luz directa desde el mediodía, como por ejemplo una terraza.
Orientación norte
Una vivienda orientada al norte recibirá poca luz natural. El sol no incide de forma directa, concentrándose la luz a primera hora de la mañana y a última hora de la tarde. En inviernos apenas recibirá luz.
Para viviendas en zonas con veranos calurosos e inviernos no muy fríos no es una mala opción. Con esta orientación podremos ahorrar en aire acondicionado en verano, pero es cierto que en invierno puede suponer un gran gasto en calefacción, especialmente las semanas de «olas de frío», y apenas reciben luz natural.
La distribución ideal de estas casas con orientación norte sería dedicar las estancias más expuestas al frío a usos esporádicos, como la cocina o el despacho, y las estancias que reciben luz solar indirecta para el dormitorio o el salón. También se recomienda reforzar con un buen aislamiento térmico las puertas y ventanas, para que los meses de más frío podamos ahorrar en energía.
Orientación sur
Una vivienda orientada al sur tendrá mucha luz durante todo el día en primavera, otoño e invierno y en verano en las horas centrales, cuando hace más calor.
Para viviendas en zonas con veranos calurosos e inviernos no muy fríos, supondrá ahorrar en calefacción durante el invierno ya que recibe mucho sol, pero en verano puede ser una casa muy calurosa, aumentando el consumo de aire acondicionado.
La distribución ideal de estas casas con orientación sur sería situar las estancias principales mirando al sur para aprovechar mejor la luz natural, como por ejemplo una terraza o el salón, dejando la cocinda o los baños en la parte trasera. Para evitar el excesivo calor del verano es recomendable instalar toldos que reduzcan la incidencia directa del sol.
