La Comunidad Valenciana ha vuelto a ser el escenario de uno de los peores temporales desde que existen registros. Una tragedia que se suma a las que esta región viene acumulando en los últimos años.
Altea también se enfrenta a desafíos naturales relacionados con el riesgo de inundaciones. Aunque no está incluido en los municipios con una alta inundabilidad, Altea cuenta con zonas inundables que pueden representar un riesgo debido a su proximidad al mar y a varios ríos y barrancos que atraviesan la zona.
En este artículo, exploraremos cuáles son las áreas más propensas a inundaciones en Altea, las causas de este fenómeno y las medidas preventivas que se están implementando para minimizar sus efectos.
1. Contexto geográfico e hidrológico de Altea
Altea se encuentra en una región costera con una orografía diversa, caracterizada por montañas cercanas, amplios acantilados y calas costeras, con varios cursos de agua que desembocan en el mar Mediterráneo.
Los principales cursos fluviales de la zona son el río Algar y su afluente el Guadalest que discurren por el término de Altea. El resto de la red fluvial es de circulación intermitente, como el Barranc del Barranquet o el Barranc dels Arcs.
Esta red fluvial puede experimentar crecidas durante episodios de lluvias intensas, generando un riesgo de inundación en ciertas áreas de la localidad.
Además, el clima mediterráneo de la zona se caracteriza por periodos de lluvias intensas, especialmente en otoño, cuando fenómenos como la gota fría o Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) suelen provocar lluvias torrenciales en un corto periodo de tiempo. Estas lluvias pueden saturar rápidamente los cauces y las zonas de drenaje, generando inundaciones.
Existen documentados varios episodios de lluvias torrenciales e inundaciones en Altea. Estas trombas de agua han causado destrozos y numerosos daños en infraestructuras viarias, en el campo y en las zonas urbanas, especialmente en la zona del río Algar y Garganes. Como dato histórico, los valores más elevados de lluvias recogidas en 24h se produjeron del 27 de Septiembre al 7 de Octubre de 1986, con 382mm recogidos.
2. Áreas inundables en Altea
Altea no está incluida en los municipios con una alta inundabilidad, donde la edificación no está permitida en 100 metros en cada margen de un cauce de agua.
Las zonas inundables en Altea están principalmente concentradas en áreas bajas y cercanas a los cursos de agua. El Ayuntamiento de Altea publicó en 2015 un estudio de inundabilidad en el municipio, analizando tanto las zonas de riesgo y los cauces existentes. Las áreas que más probabilidades tienen de sufrir inundaciones son:
- Desembocadura del río Algar (riesgo 1, alta frecuencia y calado), entre la zona urbana de Garganes y el polideportivo, y el Cap Negret.
- Barranquet (riesgo 6, baja frecuencia y calado), zona de huertas detrás del colegio El Blanquinal, donde está situada la ermita de San Luis.
- Els Arcs (riesgo 6, baja frecuencia y calado), zona de huertas detrás del Club Tenis, donde está situada la ermita de San Isidro.
El río Algar es uno de los principales cauces de la región y se desborda ocasionalmente en temporadas de lluvias intensas. Las zonas más cercanas a su desembocadura y al cauce principal son especialmente vulnerables. Afecta habitualmente a la zona urbana de Garganes, muy especialmente a las inmediaciones del polideportivo y el paso subterráneo del ferrocarril en la Calle Garganes.
Las zonas del Barranquet y Els Arcs son de riesgo bajo, aunque estos cauces pueden experimentar crecidas que afectan a áreas cercanas, especialmente a urbanizaciones y viviendas en las zonas más bajas.
Otras zonas de barrancos, como el barranco de l’Olla, barranco Marymontaña, barranco Galera o el barranco del Salt, en las inmediaciones de Altea la Vella, Sierra de Altea y Altea Hills, se ven favorecidos por la orografía que distribuye su cauce sin problemas graves de inundaciones hasta la Olla y Mascarat.
3. Factores que contribuyen a las inundaciones
Algunos de los principales factores que contribuyen al riesgo de inundación en Altea incluyen:
- Cambios en el uso del suelo y urbanización: La urbanización en áreas cercanas a los cauces de agua y el sellado del suelo limitan la capacidad de absorción natural del terreno, aumentando la escorrentía superficial y el riesgo de desbordamiento. Afortunadamente, las zonas inundables de Altea no son zonas de una alta densidad urbanística, siendo las construcciones más frecuentes de uso rústico.
- Fenómenos meteorológicos extremos: La frecuencia de episodios de lluvias torrenciales parece haber aumentado en los últimos años, posiblemente debido al cambio climático. Esto se traduce en mayores riesgos de inundación.
- Infraestructura de drenaje insuficiente: Aunque se han realizado obras de acondicionamiento recientes, algunas zonas urbanas de Altea pueden no tener sistemas de drenaje diseñados para manejar grandes cantidades de agua en periodos cortos, lo que resulta en la saturación de las infraestructuras y en inundaciones urbanas.
4. Medidas de prevención y gestión del riesgo de inundación
El Ayuntamiento de Altea y otras autoridades están trabajando para minimizar los efectos de las inundaciones mediante la implementación de diversas estrategias y medidas preventivas:
- Mapeo de áreas de riesgo: Se han desarrollado estudios y mapas de inundación que identifican las áreas más vulnerables. Destaca el Plan de acción territorial sobre prevención del riesgo de inundación en la Comunidad Valenciana (PATRICOVA), aprobado mediante Decreto 201/2015. En este plan de acción se dispone de mapas cartográficos en detalle donde podemos ver las zonas inundables de Altea. Esto permite una mejor planificación urbana, evitando nuevas construcciones en zonas de riesgo.
- Sistemas de alerta temprana: Para proteger a la población, se han establecido sistemas de alerta temprana que informan a los residentes y turistas sobre posibles episodios de lluvias intensas y el riesgo de inundación.
- Mejora de la infraestructura de drenaje: Se han implementado proyectos para mejorar el sistema de drenaje y aumentar la capacidad de los cauces fluviales. También se están construyendo y manteniendo diques y otras barreras en zonas estratégicas para desviar el flujo de agua en momentos de crecida.
- Conciencia ciudadana: Se han desarrollado campañas informativas para educar a los ciudadanos sobre el riesgo de inundación y las medidas de seguridad que deben adoptar. Además, se realizan simulacros y actividades de preparación para asegurar que la población sepa cómo actuar en caso de emergencia.
Sin grandes riesgos para la población, las inundaciones son un riesgo natural recurrente en Altea debido a su localización geográfica y clima. Estas inundaciones pueden causar daños materiales, especialmente en zonas concretas del río Algar y Garganes. La colaboración entre las autoridades locales y los ciudadanos es esencial para reducir el impacto de este fenómeno y proteger tanto a las personas como a los bienes.