La venta de una casa es un proceso largo, repleto de trámites y negociaciones, y que requiere de mucha organización. A pesar de que el mercado inmobiliario está en auge, y muchos prometen vender una casa en pocas semanas, solo el 21% consigue vender la casa en menos de 2 meses. Según diferentes estudios, en un 72% de las ventas de vivienda se tarda menos de 1 año. Un 16% tarda entre 1 y 2 años, y un 13% tarda más de 2 años. La media suele estar en 6 meses para vender la casa, dependiendo lógicamente de la oferta y demanda.

Tiempo medio para vender una casa en España

El proceso de vender una casa va desde el proceso de encontrar y elegir la vivienda, negociar el precio final de venta, firmar las arras, solicitar la financiación y, finalmente, firmar la compraventa. El tiempo medio de venta es de:

Menos de 2 meses 21%
Entre 2 y 4 meses 18%
Entre 4 y 6 meses 17%
Entre 6 y 12 meses 17%
Entre 12 y 24 meses 15%
Más de 2 años 13%

El tiempo que se tarda en vender la casa dependerá de la zona en la que se vende la vivienda. Además de la ubicación, la edad del comprador también influye en el tiempo que se tarda en vender la casa. Cuánto más mayor es el comprador, más rápido se cierra la operación de compra. Los objetivos según la edad son diferentes: los jóvenes están buscando su primera vivienda en propiedad o mejorar su vivienda actual, mientras que los mayores compran viviendas como segundas residencias o como inversión.

El tiempo de encontrar, elegir la vivienda y negociar el precio final de venta es seguramente el más largo de todo este proceso. Resulta imprescindible, ya que cada comprador tiene sus necesidades y circunstancias, además de que la oferta/demanda condicionará estos plazos. Algunos compradores se apurarán y tendrán más prisa en encontrar vivienda – aumento de familia, cambios de trabajo – y otros analizarán cada detalle y se tomarán más tiempo – viabilidad de la operación de compra, posibles reformas, una mayor oferta para estudiar. Las negociaciones suelen ser más rápidas, especialmente si el precio está en mercado y se trata de una buena oportunidad.

Cuando se alcanza un acuerdo por el precio de la vivienda, se suele firmar un contrato de arras donde se reserva la vivienda. El comprador entrega una determinada cantidad de dinero y la vivienda quedará reservada durante un plazo libre estipulado en el contrato, que suele ser entre 20 y 60 días desde el momento en el que se firma. Durante ese tiempo el comprador tendrá que conseguir la financiación necesaria, por lo que si tuviera algún problema con ello es posible realizar una prórroga del contrato de arras.

Por lo general, las entidades financieras suelen tardar unos 15 días en conceder una hipoteca, tiempo necesario para hacer el estudio de viabilidad y, si procede, aprobar la solicitud. No obstante, en algunos casos este tiempo puede llegar a prolongarse hasta dos meses. Es importante mencionar que no es lo mismo el plazo de concesión de la hipoteca que la firma de ésta. Este tiempo suele ser de un mes, aunque puede alargarse hasta tres, según la tasación de la vivienda o la disponibilidad de la notaría.

Finalmente, otro aspecto que no se tiene en cuenta en este proceso de compraventa es conseguir el ahorro necesario para la entrada de la casa. Es un proceso lento para el que hay que hacer un gran esfuerzo, donde al menos hay que tener ahorrado el 20% del precio de la vivienda más el 10% de los gastos de la operación. Según diferentes estudios, se tarda una media de 7 años en conseguir este ahorro.

¿Cómo se tarda menos en vender una casa?

Existen muchas variables que hacen que se pueda vender una casa en menos tiempo. Los más importantes son:

  • La planificación. Vender una casa requiere organización. Desde encontrar una agencia inmobiliaria de confianza, realizar posibles reformas y arreglos para revalorizar la casa, hacer buenas fotografías de la casa, hasta reunir toda la documentación que nos puedan solicitar.
  • La ubicación de la casa. Zonas con mucha demanda y poca oferta, como por ejemplo las zonas de playa o la urbanizaciones exclusivas con viviendas unifamiliares es más fácil vender la casa.
  • La época del año. Hay épocas del año donde los posibles compradores están más dispuestos a tomar decisiones, como es la primavera o la vuelta del verano.
  • La búsqueda de compradores. No solo se trata de conseguir potenciales compradores interesados en la vivienda, sino también atraer compradores buenos que no nos hagan perder tiempo. Un buen asesoramiento inmobiliario nos podrá ayudar a decidir si debemos hacer reformas para atraer a más compradores.
  • Las visitas y las negociaciones. Probablemente sea el factor que más tiempo consume. En este proceso deberemos tener cierta flexibilidad ante las ofertas que nos realizar y estudiar si debemos ajustar el precio con respecto al del mercado para que no supere la media de nuestra zona. Contar con la ayuda de un agente inmobiliario experto en negociación nos ayudará a acortar los tiempos. También en gestionar las visitas, que puede suponer mucho teimpo en prepararlas de forma adecuada.
  • El papeleo. Tener todo preparado para agilizar los trámites legales para vender la casa nos puede ayudar no solo a reducir el tiempo para vender la casa, sino a conseguir clientes serios que perciban que tenemos toda la documentación bien atada.

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