Como en prácticamente cualquier sector, habrá un antes y un después en el sector inmobiliario. Más allá de las medidas adoptadas para reactivar el sector, las agencias inmobiliarias como Ampervillas en Altea han hecho un gran esfuerzo para adaptar sus servicios a la nueva situación. Unas tendencias que han llegado para quedarse y que analizamos a continuación:

Cambios en los intereses de los compradores

Los últimos meses, bajo el confinamiento por la crisis del coronavirus, han supuesto que pasemos un mayor tiempo en casa. Muchos potenciales compradores han descubierto que su casa no es la que necesitan y se han replanteado sus necesidades para vivir en una casa más grande y con mejores características para afrontar una futura cuarentena.

Viviendas con más espacio, con estancias destinadas al teletrabajo, alejadas de zonas urbanas y con parcelas amplias. En el portal inmobilario de Ampervillas hemos detectado un mayor número de búsquedas de villas y chalets amplios, con jardín y piscina. Además, el interés de muchos compradores interesados en la zona de Altea es optar a casas más amplias por el mismo precio e incluso menos que una casa en una gran ciudad. Hay estudios que incluso afirman que este tipo de viviendas aguantarán muy bien la crisis del coronavirus e incluso se revalorizarán.

Reformas en las viviendas

Con más tiempo encerrados en casa debido al confinamiento y el estado de alerta por el coronavirus, seguramente hemos detectado deficiencias y posibilidades de mejora en nuestras viviendas. Se estima que más del 70% de las viviendas realizarán algún tipo de reparación a lo largo del verano, también con vistas a una nueva reclusión en el otoño si hubiera un rebrote. Por otra parte, estas obras de reforma también se hacen con urgencia para adaptar las segundas residencias y viviendas de alquiler vacacional con el objetivo de pasar las vacaciones de verano ante la incertidumbre de no poder viajar o alojarse en hoteles.

visitas viruales a viviendas

Las herramientas digitales como las visitas virtuales, asesoramiento inmobiliario mediante videollamadas o la realidad aumentada serán claves en el futuro del sector inmobiliario.

Inversiones inmobiliarias

Aunque la incertidumbre de la situación del coronavirus afecta a las inversiones inmobiliarias, los expertos apuntan que las inversiones en villas y apartamentos en destinos de costa como Altea seguirán siendo el objetivo de inversores que permanecen al acecho de buenas oportunidades. Los buenos precios, la posibilidad de situar con facilidad la vivienda en el mercado de alquiler y disponer de una segunda residencia en la playa o una vivienda para la jubilación, son factores que siguen atrayendo el interés de compradores e inversiones, especialmente extranjeros.

Las alternativas que hay en otros productos de inversión con poca rentabilidad y la inestabilidad de las bolsas ayudan a que la compra de una vivienda sea una oportunidad de valor refugio.

Servicios inmobilarios digitales

Las agencias inmobiliarias ya han comenzado a adaptar su modelo de negocio para combinar la presencia física con múltiples canales digitales.  El coronavirus ha llevado a la transformación digital a muchas inmobiliarias. El temor a un nuevo repunte de la enfermedad y la reducción de la movilidad hace imprescindible implantar servicios inmobilarios omnicanales para realizar cualquier trámite y gestión relacionada con la vivienda.

La combinación de una presencia física en una oficina con todas las medidas de seguridad e higienen que la situación exige, con una estrategia digital adecuada (portal web, presencia en redes sociales, herramientas digitales, etc.) será fundamental para ofrecer un buen servicio a los clientes en la era post coronavirus.

Para ello será necesario la implantación de herramientas digitales tales como la búsqueda inteligente de propiedades, visitas online, asesoramiento mediante videollamadas, firmas digitales, canales de comunicación directos entre compradores, vendedores y agencias inmobiliarias o plataformas cloud de servicios de compraventa, asesoría y gestión inmobiliaria.

En Ampervillas hemos visto como han crecido las solicitudes de todos estos servicios inmobilarios a distancia, como la gestión de contratos (de arras, de compraventa, de alquiler), trámites relacionados con herencias, hipotecas o notarios, o cualquier gestión relacionada con la casa como seguros de vivienda, mantenimiento del hogar o servicios de gas, agua, luz o telefonía. Nuestros agentes se encargan de pueden encargar de todos estos trámites y papeleos, en una situación de distanciamiento social y restricciones en la movilidad. Y para los clientes internacionales, con la ventaja de poder ser atendido en español, inglés, francés, alemán y holandés.